Nadie es perfecto. Anécdotas de una enfermera Parte II

anecdotas-enfermera-2

Hace algún tiempo que no dedico un hueco del blog a escribir anécdotas de la vida profesional. Posiblemente conozcáis alguna de ellas u os hayáis preguntado el porqué de otras; y si no, nos echamos unas risas 😀 😀 😀

En esta ocasión, voy a realizar un listado de unas pocas de dichas anécdotas, a ver si os gustan:

  • Cuando trabajas en turno de noche, que, en principio debería estar todo en silencio, ¿no es cierto que escuchas muchos más ruidos de lo normal? Además, la mente hace pasar muy malas pasadas, te imaginas los pasillos de «The Walking Dead» o «Bioshock». Vaya tela…

hospital

  • Cuando estás a punto de dar el parte a tu compañera y solo faltan 2 minutos para el cambio de turno, el médico te deja sobre la mesa los tratamientos. NO!!!! ¿Por qué? Pues nada, han caído en tu turno, por lo que, te aguantas y los administras. En nuestro trabajo conocemos la hora de entrada, pero no la de salida…
  • ¿Por qué la familia se fía más de los consejos y cuidados de la vecina que de tu consejo? Pero vamos a ver…¿es que no tenéis una enfermera en casa? (Aunque a veces, no me fiaría ni yo de mí misma…) 😛
  • Cuando estás hasta arriba de trabajo y no puedes ni con tu alma, ¿por qué te surgen todo tipo de imprevistos?, ¿A caso el karma se vuelve contra tí?.
  • Es una faena cuando se te cae el boli, ya que todo lo demás va después, las tijeras, termómetros, lápices y todo lo que llevas encima (recuerdas a Pepe Viyuela). Menos mal que yo ya tengo mi estupendísimo estuche porta-pinzas y ya no se me cae nada.
  • Y hablando de bolis, ¿cómo es posible perder tantos?, ¿A dónde van a parar? Estás escribiendo, lo dejas un momento sobre la mesa y el boli ha desaparecido…(esto es de «Cuarto Milenio»)

bolis

  • Otra cuestión que siempre me ha llamado la atención, a parte de los bolis y pasillos de hospital, ¿porqué los disfraces de enfermera son siempre tan sexys? Supongo que es muy cómodo salir corriendo en un aviso con taconazos y minifalda. Y en lugar de llevar el estuche porta-pinzas, ponemos todo en la liga (a modo de Tomb Raider), ya que nos pilla de mano. Ahh, y que no se caiga la cofia, que como te agaches ya la has liado 😀

 

Bueno, esto es todo por hoy, espero que os haya gustado.

No olvidéis comentar a EBDLE vuestras anécdotas, que seguro, tendréis unas pocas.

😉

 

 

Deja una respuesta